Iguales opuestos.

A lo largo del vídeo los personajes hacen una evolución psicológica, que se basa en el cambio de opinión, en la destrucción de la desconfianza, el sentido de posesión de uno hacia otro, etc.

Cuando el vídeo comienza, son aparentemente dos personas, pareja, tomando algo en un bar, tranquilamente; una situación totalmente normal, pero según va avanzando la escena observamos cómo cuanto más insistente es el chico, más se aleja de la chica, sin darse cuenta, involuntariamente.

¿Hasta qué punto NECESITA una justificación por parte de su pareja? Necesita sentirse seguro; confiar en ella, y su forma de llegar a ello es siendo controlador. No consigue tener confianza en ella, necesita ver todo para comprobar que es verdad, y a su vez, necesita demostrarle a ella que tiene razón, que lo ha leído, que estaba conectada. Lo que no es capaz de ver es que está perdiendo lo que realmente quiere por su forma de ser; entendiendo esto como algo que no es positivo ni negativo. Sus reacciones desencadenan en ella un sentimiento de rechazo, no hacia él, pero sí hacia su comportamiento, hasta tal punto de que no soporta la idea de estar con alguien así, controlador, que no la cree y por tanto no la respeta, que necesita tener razón para sentirse bien.

La escena termina con la ruptura de la pareja: ella le muestra el móvil con el objetivo de que vea que podía haber confiado en ella, y que a veces no se trata de demostrar que tenemos razón o no, si no que ella necesitaba que él estuviese seguro de sus sentimientos, y termina su relación con él, alegando que cree que ya no le quiere. En realidad, ha descubierto su personalidad insegura, que a veces nubla lo demás y no deja que reluzcan sus demás virtudes, si no que hace que él cambie, se transforme, en una forma que a ella no le agrada.

Esto demuestra que hay personas incompatibles, y que sólo con tiempo podemos conocer a una persona, dado que a veces ciertas situaciones promueven el afloramiento de nuestros diferentes tipos de apego. Querer no es sólo aceptar a alguien, es saber convivir; no necesariamente tiene que gustarnos todo de esa persona, pero sí tenemos que ser capaces de amoldarnos, aprender, mejorarnos. En esta ocasión, esto ha sido imposible: han chocado demasiado sus tipos de apego, y no han sido capaces de compatibilizarlos.